Después de cuatro meses de ausencia a causa de una fractura en la mano izquierda, Steph Curry volvió a calzarse oficialmente la camiseta de los Golden State Warriors, en un encuentro en el cual, a pesar de su buena actuación, terminó perdiendo ante los Toronto Raptors 121-113.
En su regreso, Curry estuvo en cancha 27:14 minutos en los cuales convirtió 23 puntos (fue el máximo goleador de los Warrior junto a Damion Lee, quien consiguió la misma cantidad), 6 rebotes y 7 asistencias.
En los días previos a su retorno, el entrenador Steve Kerr envió a Curry a trabajar con el plantel de los Santa Cruz Warriors, el equipo que Golden State posee en la G-League, para comenzar a recuperar el ritmo perdido.
Curry llevaba jugados sólo 4 partidos en la presente temporada, ya que sufrió la fractura de la mano izquierda el 30 de octubre en el partido ante los Phoenix Suns, y se perdió los 58 siguientes.