Para el técnico de Newell’s, Frank Kudelka, el tema lesionados se ha transformando en el gran escollo de las últimas fechas.
Todo empezó en el partido con Estudiantes en el estadio Marcelo Bielsa, donde se desgarró Ángelo Gabrielli, Mauro Formica sufrió una pubalgia y Lucas Albertengo, un esguince de tobillo.
Después, en la previa del encuentro contra Colón, también en el Parque Independencia, quedó descartado Aníbal Moreno (traumatismo en la rodilla izquierda) y durante el cotejo frente al Sabalero, Facundo Nadalín sufrió una distensión en el isquiotibial izquierdo.
Al no poder contar con los dos laterales derechos del plantel, improvisó con Matías Orihuela, el pasado viernes ante Racing en Avellaneda.
Pero más allá del saldo positivo que dejó el juego colectivo del equipo en el empate 1 a 1, otra vez lo negativo fue el tema de las lesiones.
Porque Pablo Pérez terminó el partido con un fuerte dolor en el sóleo derecho, aunque en realidad se trata de un problema muscular que lo dejará un par de encuentros fuera de la consideración de Kudelka.
En las próximas horas, el ex Boca e Independiente le realizarán los estudios correspondientes para conocer el período de rehabilitación en la zona afectada.
Pese a todos estos inconvenientes, Newell’s extendió su buena racha a 8 partidos sin conocer la derrota con 3 victorias y 5 empates, continúa alejado de la zona del descenso directo y aspira a la clasificación de alguna de las copas internacionales.
El plantel tuvo el fin de semana para descansar y hoy volvió a las prácticas en el Centro de Entrenamiento Jorge Griffa de cara al partido del domingo por la noche como local ante Godoy Cruz de Mendoza, por la última fecha de la Superliga.
Una situación propicia para volver a sumar de a 3 puntos en su propia cancha ante el peor conjunto del torneo, que apenas suma 12 puntos, cierra la tabla de posiciones y que de los 10 cotejos que jugó como visitante, apenas ganó uno, a Patronato en Paraná por 2-0, y perdió los nueve restantes.