Leonel Pernía llegó a la última fecha de Súper TC2000 como gran candidato a adueñarse del título y esta vez no dejó escapar esa posibilidad. El piloto tandilense terminó segundo en la carrera decisiva de la temporada disputada en Neuquén, detrás del ganador Agustín Canapino, y se sacó la espina de consagrarse campeón en esta categoría.
El apodado Tanito, cinco veces subcampeón (dos en la antigua TC2000 y tres con la nueva denominación), se tomó revancha en este 2019 y le dio al equipo Renault su tercer título consecutivo de pilotos en esta divisional, tras las dos conquistas anteriores de Facundo Ardusso.
A bordo del Renault Fluence número 3, Pernía construyó una temporada excelente, con tres triunfos e igual cantidad de pole positions, y la decoró con una segunda posición en el autódromo de la ciudad de Centenario.
De esta manera, el piloto bonaerense, que largó desde la posición de privilegio tras imponerse en la clasificación del sábado, y no le opuso resistencia al ataque de Canapino en la largada, se adjudicó su segundo título en el automovilismo argentino.
Pernía, de 44 años, venía de consagrarse en 2018 en la Clase 3 de Turismo Nacional.
Matías Rossi, el único rival de Pernía en la lucha por el campeonato en esta última fecha, le cedió el último escalón del podio en el circuito neuquino a su compañero de equipo Julián Santero, en la penúltima vuelta.
De todas maneras, ese puesto no le alcanzaba a Rossi para soñar con recuperar la corona de Súper TC2000 con su Toyota Corolla, debido al andar parejo del Fluence del Tanito durante las 26 vueltas de carrera.
Pernía se quedó entonces con la gloria en una temporada de cambios para la categoría, entre ellos, la incorporación de los motores turbo.
Foto: Prensa Renault Sport.