El francés Jerome Garces será el árbitro que dirija las acciones de la final del Mundial de rugby Japón que jugarán el próximo sábado Inglaterra y Sudáfrica.
“Como referee, esto es algo soñado, pero este es un deporte de equipo, y como equipo de cuatro, estaremos ahí afuera haciendo nuestro mejor esfuerzo por los equipos, los fans y el deporte”, dijo Garces.
El francés, de 46 años, participa de su tercera Copa del Mundo, ya que estuvo presente en las de 2011 y 2015, y el del próximo sábado será su undécimo partido en el marco de un mundial.
Garces estará acompañado por su compatriota Romain Poite, y los neozelandeses Ben O’Keeffe y Ben Skeen (TMO).
Inglaterra-Sudáfrica se jugará el próximo sábado, desde las 6 de la Argentina, en el estadio Internacional de Yokohama.
Por su parte el inglés Wayne Barnes será el encargado del partido que sostendrá Nueva Zelanda y Gales por la medalla de bronce.
El inglés, quien dirigirá su encuentro número 21 en mundiales, será secundado por Jaco Peyper (Sudáfrica) y Pascal Gaüzère (Francia), como asistentes, y Marius Jonker (Sudáfrica) como TMO.
El partido entre All Blacks y Dragones Rojos se llevará a cabo el viernes, a partir de las 6, en el Tokio Stadium.