Rosario Central está afuera del descenso directo más por los errores de los rivales que por mérito propio. En ese contexto, el plantel retornará mañama por la tarde a los entrenamientos en el predio de Arroyo Seco, ya pensando en el partido del domingo contra Lanús.
Los jugadores tuvieron descanso este lunes, luego del inmerecido empate contra Racing Club, que tuvo a su arquero Gabriel Arias como la gran figura del partido.
Más allá de los remates en los palos y las fallas propias en la definición por parte de los futbolistas canallas, lo positivo fue que el equipo mejoró notoriamente en lo futbolístico y tal vez fue el mejor partido en la era Diego Cocca. Aunque sigue sin poder ganar y ya acumula 6 empates consecutivos.
Al técnico auriazul no le gusta cuando se lo remarcan, entonces responde: “Hay formas de ganar, empatar y perder. Y esta es una buena forma de empatar, no veo el vaso medio vacío”, como lo hizo en la última conferencia de prensa. Su argumento es siempre el mismo: “estamos invictos”, “trabajando para crecer” y “vamos a seguir por este camino”.
Lo cierto es que hoy Central no está afuera del descenso directo por mérito propio, sino por las pobrísimas campañas de los otros conjuntos que pelean por mantener la categoría. Como es el caso del recientemente ascendido Central Córdoba de Santiago del Estero y ni que hablar de Gimnasia y Esgrima La Plata, que acumula 7 derrotas al hilo. Ni la llegada de Diego Maradona como entrenador logró cortar dicha nefasta racha. Por eso lo tiene por debajo en los promedios.
Y ahora se sumó al trío Aldosivi, que cayó en 5 de 8 fechas jugadas y tuvo como desenlace la renuncia de Gustavo Álvarez al cargo de técnico del Tiburón. Pero hay un dato a tener en cuenta: el club marplatense divide por dos temporadas y Central por tres, al igual que Patronato, Banfield, Colón, Newell’s Old Boys y Estudiantes, las otras instituciones que también pugnan por continuar en la máxima categoría del fútbol argentino. Y entre los seis equipos sólo hay cuatro puntos de diferencia…