Compitió, y obtuvo grandes resultados, en diversos torneos a lo largo de su experiencia como jinete. Sin embargo, la de este martes no fue una presentación más para Eve Jobs. La hija de uno de los co-fundadores de Apple, Steve Jobs, tuvo su debut en los Juegos Panamericanos de Lima, y no defraudó.
La deportista de 21 años, una de las herederas de la fortuna que dejó Steve Jobs al fallecer en 2011, finalizó sexta en la primera ronda de clasificación de salto individual ecuestre en la Escuela de Equitación del Ejército, escenario ubicado en el distrito de La Molina donde Eve Jobs fue la gran atracción.
Su compatriota Elizabeth Madden fue la mejor de la prueba con un tiempo de 68.82. Jobs terminó como la segunda mejor entre las mujeres, al emplear 71.116 segundos para realizar los 15 saltos sobre su yegua Venue D’Fees Des Hazalles.
También colaboró para que Estados Unidos encabezara la primera ronda de clasificación de saltos por equipo.
La jinete de 21 años volverá a competir este miércoles, cuando buscará mantener el sueño de colgarse una medalla en individuales (tiene el orden de salida número 38 en la segunda ronda clasificatoria que comenzará a las 12) y por equipos (duodécimo y último en el orden de salida de la Ronda 1).
Foto: Vidal Tarqui / Lima 2019.