Y Roger Federer sigue agigantando la leyenda.
En un partido que por momentos tuvo un nivel de juego altísimo, Federer superó a su eterno rival, el español Rafael Nadal, para continuar escribiendo la historia grande del tenis.
Fue por un 7-6 (3), 1-6, 6-3, y 6-4, que le demandó a Federer no sólo 3 horas y 02 minutos, sino también poner cuerpo y alma para doblegar a un rival que sólo se rindió con el último punto perdido.
Necesitado, por sus 37 años, de que cada punto, cada game, y cada set, no fueran extensos, el inicio del partido seguramente no fue lo que Federer imaginó.
El primer set fue sumamente parejo, cada uno impuso su estilo, y fue hasta el octavo game que se produjo la primera oportunidad de quiebre. La tuvo Federer, no la aprovechó, y la definición fue al tie-break.
Allí se impuso el suizo, pero si pensó que eso le permitiría tener un panorama más claro, se equivocó. Su saque comenzó a fallar, cometió más errores de los deseados, y en el tercer game Nadal, finalmente, le quebró el servicio.
Nadal mantuvo la misma energía, Federer no pudo reencontrarse con su juego, y el español tuvo un nuevo quiebre, para llevarse la manga por 6-1. ¿Partido terminado?
Nada de eso. Lo que no pudo conseguir Federer en los 37 minutos que duró el segundo set, lo logró en el tercero. Recuperó la precisión de su saque, puso el cuerpo para aguantar los peloteos que le proponía Nadal, y tuvo algo fundamental: fue certero en los puntos importantes.
El suizo se quedó con el saque de Nadal para ponerse 3-1, y a partir de ahí mantuvo la ventaja para llevarse un nuevo set, y poner en jaque al español.
Ahora si, el cuarto set fue la prolongación del tercero. Federer tuvo una oportunidad de quiebre en el arranque y la concretó. Se puso 2-1, y ya no hubo vuelta atrás.
Al español lo salvó su capacidad para defender y el amor propio, como en el octavo game, cuando Federer, con el saque de Nadal, dispuso dispuso de dos match point.
Una situación similar se vivió en el noveno game (5-4). Federer no pudo concretar las dos primeras pelotas de partido, ambas salvados por sendos winners de Nadal, pero en la tercera el revés del español se fue largo, y decretó la victoria del suizo.
En la final, el suizo se enfrentará al serbio Novak Djokovic (1), quien superó al español Roberto Bautista Agut por 6-2, 4-6, 6-3 y 6-2.
En el duelo personal, Djokovic se impuso a Federer en 25 de los 47 partidos que jugaron hasta el momento.
Dentro de esos 25 triunfos conseguidos por Djokovic se encuentran las dos finales que le ganó a Federer en 2014 y 2015.
Foto: ATP/Getty Images