San Miguel largó su puesta a punto para la próxima temporada de Primera B con nuevo cuerpo técnico encabezado por Matías De Cicco. Lo particular de este entrenador es que no sólo la táctica es su especialidad; antes de lanzarse como director técnico se recibió y ejerció como médico psiquiatra y difunde sus conocimientos sobre rock en el programa radial “No se puede hacer más lento”.
Claro que el fútbol siempre acompañó sus pasos. De chico jugó en las divisiones inferiores de Argentinos Juniors y Chacarita Juniors, aunque priorizar el estudio, por mandato familiar, lo hizo dejar. Sin embargo retomó, más adelante, su contacto con la pelota en el torneo interno de GEBA.
De Cicco tuvo su estreno como técnico la temporada pasada dirigiendo, en dupla con Alejandro Segarra, a Atlético Lugano en el certamen de Primera D.
El Loco Marcelo Bielsa tuvo mucho que ver en su lanzamiento. “Hace varios años armé un proyecto novedoso para el fútbol, incluyendo la preparación desde el aspecto mental. Se lo mostré a Bielsa, con quien tuve una charla muy enriquecedora. Le gustó, pero me comentó que le parecía inviable que los directivos lo aceptasen y me aconsejo trabajar con algún técnico amigo o recibirme yo mismo para aplicar mi propuesta. Así empecé el curso en ATFA, en un momento tuve que interrumpirlo y luego retomé, y Alejandro Segarra me acompañó en Lugano”, explica.
“La llegada a San Miguel se dio tras presentarle un proyecto a Fernando Insaurraga; luego de varias reuniones y cuestionamientos, aceptó darme la oportunidad para plasmarlo en San Miguel”, le dice De Cicco a IAM Noticias.
Sobre su bautismo en Lugano resalta: “me dio muchas enseñanzas en general, quizás lo más destacable de esa experiencia tiene que ver con la certeza de que aquello que nos propusimos trabajar se pudo realizar, fue aceptado el mensaje y por sobre todas las cosas resignificado. Claro está que los trabajos internos a veces no reflejan sus resultados deportivos y el fútbol sigue siendo interpretado solo por sus resultados, lo cual termina por rechazar los procesos”. Sobre el salto de dos categorías, opina: “El cambio es sustancial en muchos aspectos. En primer lugar creo que existe una gran diferencia de abordaje social; en la D es muchísimo más presente y no termina de dar contención a la eleccion de poder vivir exclusivamente del fútbol. Sumado a que todos los jugadores de Primera B son profesionales y cuentan con otra base formativa , lo cual genera una asimilación de conceptos mucho más fluida y con más rapidez. Además es una categoría que representa mayor exposición, mayor riesgo y menos tolerancia, por lo tanto es un desafío alto y estoy con muchísima felicidad de poder transitarlo”.
Asegura De Cicco que “las expectativas para nuestra forma de asumir los desafíos, sin importar la categoría , están ligadas siempre a lo más esencial posible, que tiene que ver con poder plasmar dentro del campo de juego y en la competición , la mayor cantidad de porcentaje posible de aquello que se trabaja en todos los aspectos. Porque si el objetivo es ese, el resultado puede ser positivo o quizás no, pero el argumento es atravesado de manera incondicional y eso genera sentido al camino recorrido. Y si al final es con un trofeo en la mano nos sentiremos aún más satisfechos”.
Su incursión como director técnico, no archivó su diploma de médico psiquiatra. Detalla que “sigo escribiendo sobre psiquiatría, como siempre hice. Atendí mucho en hospitales y consultorios, pero estos últimos tiempo dejé de hacerlo. Tengo hecho el postgrado en la Asociación de Psiquiatras Argentinos. Apliqué y aplico mis conocimientos profesionales en negocios particulares y empresariales, como también lo hago en el fútbol”.
Los refuerzos contratados por San Miguel para el campeonato de Primera B que marcará el ciclo comandando por Matías De Cicco son, hasta el momento: Franco Cristofanelli (Argentino de Quilmes), Nicolás Pizarro (Laferrere), Matías Sarmiento, (Claypole) Ezequiel Abal (Claypole), Rodrigo Pepe (Colegiales), Arturo Mendoza (Sportivo Barracas), Alan Rios (Lugano), Nahuel León (Lugano), Fernando Gutiérrez (Municipal, El Salvador), Diego Aguirre (Spartak Jumala, Lituania), Román Gnocchi (Atlas), Martín Batallini (All Boys) y Emmanuel González (Luján).