Antonio D’Accorso, hijo y homónimo del también técnico, nació en Caracas, justamente cuando su padre dirigía en esa nación, y tiene ciudadanía argentina por sus raíces familiares. Por eso su corazón se divide entre ambos países sudamericanos. Basado en esa fusión de nacionalidades, a comienzos de este año puso en marcha un innovador emprendimiento: fundó Atlético Unión Venezuela con la intención de integrar jóvenes emigrados y llegar al fútbol de AFA.
“El 8 de enero, tomando un café con un amigo venezolano radicado en Buenos Aires y muy ligado al fútbol le conté mi idea. Me miró extrañado, pero enseguida me dio su apoyo. Me junté con mi cuerpo técnico y también me miraron como si estuvieso loco. Pero a las pocas horas el proyecto estaba en marcha; convocamos a varios chicos para una prueba y seleccionamos los primeros jugadores”, le cuenta Tony D’Accorso a IAM Noticias.
Fundador y entrenador de la flamante entidad, que mientras bosqueja un sitio propio a futuro entrena en Parque Sarmiento y programa amistosos, D’Accorso hijo está al frente de un grupo de aproximadamente 30 futbolistas cuyas edades oscilan entre los 18 y los 24 años.
“Mi sueño es llegar a AFA. Teniamos pensado, reestructuración mediante que finalmente no salió, empezar la próxima temporada de Primera D. Por el momento quedará para más adelante, sabemos que los requisitos y exigencias son complicados. Por eso seguramente arrancaremos en una Liga de la Provincia de Buenos Aires a partir de agosto. Competir es la mejor motivación y apendizaje para el futbolista”, expresa.
En los últimos años una alta cantidad de venezolanos, expulsados por la crisis económica, política y social, eligieron mudarse a Argentina. Varios de ellos, con antecedentes futbolísticos, se sumaron a Unión Atlético Venezuela. Y mientras añoran la patria de origen se integran con colegas argentinos y juntos empujan por este naciente grupo que vibra con la pasión futbolera.
D’Accorso padre desarrolló una amplia carrera como entrenador en el país y en el exterior; uno de sus equipos más recordados es el Quilmes campeón de Primera B en 1975. Su hijo jugó en Italiano, Atlanta y Tigre y luego emigró a clubes de Venezuela. Y allí salió campeón con Estudiantes de Mérida, repitiendo una vuelta olímpica varias temporadas más tarde ya como director técnico. Su curriculum de entrenador -realizado en la Asociación de Técnicos del Fútbol Argentino, ATFA- incluye, entre otros, la Coordinación del fútbol amateur de Sportivo Italiano y las inferiores de Grasshoppers de Suiza.
Aunque el presente lo halla enfrascado en Unión Atlético Venezuela, su trabajo podría llevarlo a armar nuevamente las valijas. Existe una posibilidad firme de un club de México.
“Es un país donde me gustaría dirigir, me seduce por la competitividad y los jugadores que juegan en sus campeonatos. Uno de los integrantes de mi cuerpo técnico, el mexicano Adam Angon me está entusiasma con la posibilidad”, se ilusiona.
Sin embargo, en caso de concretarse, D’Accorso, de 53 años, no archivará su ilusión: “Si me toca irme, a México o a cualquier otro plantel en Argentina o afuera, siempre voy a seguir atento a Unión Atlético Venezuela, quedará gente a cargo y voy a estar supervisando todo”, advierte.