José María Pechito López tuvo este sábado las mismas dificultades que durante todo el campeonato con el vehículo que le provee el Dragon Racing en la Formula E, y culminó decimotercero en la undécima y antepenúltima carrera de la temporada, disputada en el circuito callejero de Berna.
Sin embargo, al terminar la prueba fue desclasificado por una sanción y completó así un paso para el olvido por el circuito suizo.
López largó decimocuarto, pero la competencia se detuvo con bandera roja durante más de tres cuartos de hora porque el alemán Pascal Wehrlein no pudo superar la primera chicana en un inicio ajustado y actuó como tapón para el resto del pelotón.
El cordobés salió indemne de ese accidente múltiple y cumplió la primera vuelta en el sexto lugar. Pero tras dilatadas y acaloradas discusiones de varios pilotos con las autoridades deportivas de la prueba, se decidió que el reinicio de la carrera se produzca con la grilla original.
“Era sabido que en esa chicana iba a pasar algo, se cierra muy de golpe. Es una pena que cuando otros pilotos causan la bandera roja, los que pasaron y no tuvieron mala suerte tengan que volver para atrás. Eso está mal. Cruzamos la línea de llegada antes que se ponga el semáforo en rojo, así que deberían reordenar como estábamos”, se lamentó Pechito.
Al reanudarse la prueba, el piloto de Río Tercero, que venía de hacer podio en las 24 Horas de Le Mans con el WEC, llegó a ubicarse en la duodécima posición, pero finalmente quedó clasificado en el puesto 13.
Incluso cuando restaba un cuarto de hora para el cierre de la carrera, López quedó bajo investigación por un supuesto exceso de potencia en su vehículo eléctrico.
El francés Jean-Eric Vergné logró el triunfo en una carrera que terminó con piso semihúmedo y sacó una ventaja que puede ser decisiva en la cima del campeonato. El neocelandés Mitch Evans y el local Sébastien Buemi completaron el podio en la capital suiza.
La temporada 2018/19 de la Formula E concluirá el 13 y 14 de julio en Nueva York, Estados Unidos.