Luis Scola es el capitán del seleccionado argentino que participará del Mundial de China, y desde hace cuatro semanas se entrena en soledad en un lugar muy particular.
“Luifa” construyó una canchita en medio de su campo de la ciudad bonarense de Castelli y se mueve bajo las órdenes de Mariano Sánchez (técnica individual) y Marcelo López (PF).
A sus 39 años, el único sobreviviente de la Generación Dorada en el plantel conducido por Sergio Hernández se prepara con todo para el que probablemente será su último Mundial.
Lo más increíble es que la Copa del Mundo recién comenzará el 31 de agosto, por lo que Scola comenzó a trabajar más de tres meses antes de la competencia.