Cuesta explicar la actuación del primer tiempo de Argentina frente a Colombia. Tan difícil resulta, como el ejercicio de desmenuzar algunos de los argumentos que deslizó Lionel Scaloni para explicar la derrota del debut en la Copa América.
No es bueno posar rápidamente el índice sobre hipotéticos culpables, pero tampoco es sano evitar remarcar los defectos tras un revés como el de esta noche en el Arena Fonta Nova de Salvador de Bahía.
El “inciso” del mal estado de la cancha fue uno de los puntos que destacó Scaloni: “Me pareció lamentable el estado de la cancha y eso que fue el primer partido, me imagino cuando se jueguen más. La verdad que deja mucho que desear y es lamentable para que jueguen estos futbolistas”.
Los restantes, el primer gol que llegó “de contragolpe”, cuando en realidad fue un balón cruzado que desnudó los problemas de armado del equipo que redundó en una cobertura deficiente del sector derecho, y el cambio de Matías Suárez por Sergio Agüero, con Argentina en desventaja, porque el jugador de River “puede ser 9”.
Scaloni deberá trabajar y mucho para el siguiente partido ante Paraguay. No se trata de borrar de un plumazo los diagramado en la preparación ni de caer innecesariamente sobre los protagonistas, sino de diagnosticar agudamente las carencias de su equipo, para no repetir errores.