No tenía otra manera de terminar su opaca participación en La Liga española. O sí, pero no hubiese sido el reflejo de una temporada que Real Madrid intentará esconder rápidamente debajo de la alfombra.
El Merengue cerró su participación en el torneo español con una derrota como local por 2-0 ante el Betis de Giovanni Lo Celso, una de las figuras del partido, y el técnico francés Zinedine Zidane comenzará con la reconstrucción de la Casa Blanca.
Aquella tarea, en principio, se realizará sin el arquero costarricense Keylor Navas ni el volante galés Gareth Bale, quien hoy no contó con minutos para su más que posible despedida del Santiago Bernabéu. Pero hay muchos otros nombres que podrían continuar el éxodo.
“No es que no queremos es que no podemos. Lo mejor que nos puede pasar es que se acabe esto. Estamos pensando en otra cosa, en el futuro, en la próxima temporada”, analizó Zidane tras la caída ante el elenco sevillano, que se impuso con goles de Loren y Jesé, ambos en el complemento.
Zidane,de todos modos, ve luz al final del túnel: “Hay que aceptar cómo ha sido la temporada y no la tenemos que olvidar. Hay que tenerla muy presente para el futuro. Nos va a servir. Es un mal pero para luego un bien. Los jugadores querían, pero no se pudo”.
Real Madrid comenzó la temporada bajo la conducción técnica de Julen Lopetegui, luego de su traumática salida del seleccionado español a horas de Rusia 2018.
La batuta la tomó prontamente el argentino Santiago Solari, primero de manera interina, más luego de manera definitiva, por decirlo de algún modo.
Es que la partida de la Copa del Rey a manos de Barcelona, con una goleada en contra en el Bernabéu, y prematura eliminación de la Champions League ante el sorprendente Ajax culminaron con el fugaz ciclo del Indiecito.
Zidane, ganador de tres Orejonas consecutivas como técnico del Madrid, asumió nuevamente como técnico, menos de un año después de haber dejado el cargo, pero no pudo torcer la suerte del Real, que terminará La Liga muy lejos del campeón, Barcelona.